11 abril 2011

Saramago en la 5ª semana de Cuaresma

Aquí de nuevo, pasó el fin de semana, y pasó la tristeza –o vacío- del domingo por la tarde. Se acabó la sensación de no haber terminado los “deberes”.

A “Gatita” si le gusta el domingo por la tarde, porque nos sentamos los dos a leer en el sillón, -no el sillón Voltaire de Martín Romaña, si no en el mío- mejor dicho, yo leo y ella duerme. Y además, ella no tiene deberes. El domingo no leo en la cama y no le doy consejos a Jeorgina por la máquina de la virtualidad.


Hoy vuelve a estar el día bonito, el cielo está azul. Esta foto es de la camelia de mi terraza. (Como la "dama").

Ayer estuve cocinando, antes de sentarme a leer con la gata, hice unas lentejas con setas, que ahora os diré como se hacen y también probé una receta que me pasó Marisa, otra mujer virtual. Su receta era para "verdinas con rape", -las verdinas, son unas judías pequeñitas de color verde- se ponen en remojo la verdinas la noche anterior. En una cazuela se las cuece preferiblemente con un "fumet" de pescado, -ya dije que siempre hay que tener caldo en la cocina- añadiendo una hoja de laurel, un par de dientes de ajo y media cebolla, eso una vez cocido se pasa por un chino finito junto con unas verdinas. Tienen que cocer como dos horas.

En una sartén aparte se fríe otra media cebolla y un diente de ajo, -picado en brunoise los dos- se puede añadir una zanahoria, también muy picada, se sofríe, cuando esta pochada la cebolla, se añade pimentón y el rape, cortado en dados, se le da unas vueltas, se añade un chorrillo de vino blanco y se deja cocer un poquito y a continuación se añade, este sofrito a las verdinas, para que terminen de hacerse. Estaban buenísimas. Marisa tiene muy buena mano para la cocina.

Y como he hablado de verdinas, lo de las lentejas lo dejo para otro día. Recuérdamelo Jeorgina.

Del asunto de la guerra justa, Jeorgina no me ha dicho nada, ¿lo habrá olvidado o no habrá encontrado ninguna? Si no se me olvida, le preguntaré que pasó en la guerra del Chaco y si fue justa. Y de Rocío, sigo sin saber nada y eso que es una cholita medio virtual.

Hace mucho que no leo novelas que me gusten mucho y las que he leído, hace mucho, las he olvidado. Es lo malo mío, la cabeza.

Ayer estuve con Toñín,un amigo, que también tenía tristeza de domingo y de lunes. El la tenía también de hoy lunes, porque estábamos con dos de sus ex, y se dio cuenta que sus ex le dejaron, sin excesivo esfuerzo y no son capaces de dejar de fumar. Y eso le dio tristeza, le durará también hoy, porque ya la tenia ayer por hoy, mañana estará recuperado.

Si algún día, Jeorgina, no te recomiendo ninguna lectura, lee el periódico y puedes leer lo que te escribo entre lineas .Tampoco tenemos que estar siempre leyendo, se lee por placer y algunas veces, no queremos sentir el placer de leer.

Por ejemplo, no todo el mundo disfruta con las mismas lecturas, yo por la mañana, disfruto (o me entretengo) leyendo el periódico mientras voy a trabajar. Y hay personas que disfrutan con la novela histórica o con novelas románticas, luego, Jeorgina, si alguno de los libros que te recomiendo, se te hace un plomo, pues no pasa nada,. le dejas. Ya habrá otro. Hoy recomiendo novela histórica y romántica.

Te voy a recomendar unos libros de Saramago, yo les leí cuando estaba vivo. Saramago y Lisboa van muy bien, tendrás que probar la mezcla. 

"El año de la muerte de Ricardo Reis" no es un libro fácil de leer, pero la lectura de Saramago siempre es agradable y este, dicen por ahí, que es su mejor libro. Ricardo Reis el protagonista, es uno de los seudónimos que utilizó Pessoa. Regresa a Lisboa desde Brasil y se pasea por las sus calles, se hospeda en un hotel, en la Rua do Alecrim, la acción sucede a finales de los años 30 y se le aparece Fernando Pessoa, que había muerto en 1935. Una maravilla con "saudade". Este libro le gustará también a los amantes de la novela histórica, porque se sitúa la acción hace setenta años.

También te recomiendo, "Memorial del convento" e "Historia del cerco de Lisboa".El primero es precioso, es una novela histórica, transcurre entre Lisboa y Mafra, en la época de D. Joao V, durante la construcción del convento de Mafra (S XVIII). Los protagonistas son, Siete Soles, un soldado manco, que vuelve de la guerra contra España y Blimunda, una mujer que tiene capacidad de absorber las voluntades de los moribundos. Y Saramago dice voluntades, porque sabe que del alma no se puede hablar, porque al parecer, lo demostró Wittgenstein en el "Tractatus logico-philosophicus". ¿Por qué querrá la gata leer eso? (lo del Tractatus) Es una novela histórica, !ah!, y las voluntades las recogía Blimunda, para una maquina de volar
 
Bueno y el último, el del cerco de Lisboa, es la historia de uno como yo, -por la edad- que corrige pruebas de imprenta y un buen día decide cambiar, en la corrección de un libro de historia , un "si" por un "no". La historia no se puede cambiar, pero cambia su vida y encuentra el amor. Es novela romántica, porque habla también de amor. Y estos libros están todos por Internet, busca y hallarás, y si no halláis, preguntarme.


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